miércoles, 4 de diciembre de 2013

Nosotros te llamamos

A la fecha, llevo desempleada 3 meses, 1 semana y 4 días (y contando). Para los que no me conocen, digamos todo aquel que me está leyendo en este momento, odio estar desempleada. No, no como lo están imaginando. Yo se que todos odian estar desempleados (o en todo caso, el común denominador). Pero yo REALMENTE odio estar desempleada. No sólo porque no tengo un mango para vivir, sino porque...me siento completamente inútil, me aburro, siento que mi vida no tiene sentido (nah, lo último fue mentira).

Entonces...desempleada. ¿Ya lo dije? Entonces como buena desempleada, postulo. Postulo a casi todo lo que se me presente delante. Me siento como un hombre en busca de algún plansito, cualquier plansito, el plansito que caiga. Ya, así me siento en estos días.

Postulo por diversas bolsas de trabajo, las más conocidas y las cuales no mencionaré. Volanteo mi CV como si de prostituirme se tratara. Así de desesperada estoy. Exacto, no sólo estoy desempleada, sino también desesperada.

A la fecha, he tenido 5 entrevistas. 2 hoy día...así que hasta ayer, el número se reducía casi a la mitad. Si saco cuentas y asumo que tuve un mes muerto (materia de otro post, en algún otro momento), en casi dos meses y medio, sólo tuve 3 entrevistas. Deplorable. Inaudito. Doloroso. #ShootMeNow

El panorama se pone peor. No sólo estoy desempleada y desesperada...sino que, literalmente, la espera desespera. Y ahora me refiero a cuando me llaman para una entrevista y terminan con el clásico "no nos llames, nosotros te llamamos". ¿No se han dado cuenta? Es totalmente cruel.

No sólo estoy desempleada, sino que ahora tengo que regresar a mi casa a comerme las uñas y contar las musarañas mientras ellos se dignan a llamarme. Eso o me mandan un mail de agradecimiento (sumamente huachafo) en el que me dicen que mantendrán mi CV en sus archivos por si se abre alguna otra plaza que vaya acorde a mi perfil. Mentira. Mi CV lo tienen en sus archivos, claro...¡de la papelera de reciclaje!

¿Por qué escribo este post? Porque hoy me di cuenta (o quizá solo lo rescaté de mi memoria) que no existe el "nosotros te llamamos". Si te quieren, en ese momento te lo dicen. O te lo dicen ese día o al día siguiente TOP. No hay más. Así que si no te llamaron al día siguiente, ya fue, sigue buscando, se te pasó el tren, la misa de una y todo lo que quieras añadir.

Bueno...deséenme suerte en mi segunda entrevista...mañana!

martes, 3 de diciembre de 2013

It was O.K.

Escribir se ha convertido, finalmente, en otra de las actividades que empiezo y jamás termino: Leer un libro, estudiar, hacer una dieta/deporte/gimnasio, y puedo seguir con la lista. De cualquier manera, escribir es algo que siempre me ronda la cabeza, como las actividades enumeradas anteriormente. Supongo que hoy he convertido una idea en una actividad, pero ese no es el punto de este post.

Hoy particularmente estoy escribiendo por una amiga...o eso creo. Una amiga que también solía escribir. Probablemente, la inspiración nos dejó a ambas al mismo tiempo. Ambas simplemente dejamos de escribir. A pesar que yo siempre tuve intentos por retomarlo, ella nunca más escribió (y escribía muy bien, by the way).

Es una amiga que solía ver todos los días. Una amiga que en algún momento de mi vida fue mi "mejor amiga" (y lo pongo entre comillas porque tengo todo un dilema con ese término, pero esa es otra historia). Como decía, una amiga de la universidad y de la vida. Estábamos destinadas a encontrarnos y así fue. Es (o era, ya no me queda claro) casi tan loca como yo, y no estoy usando ese término en sentido figurado.

A la fecha, es la única amiga con la que he vivido...un mes, eso qué importa, pero ha sido la única. Esto no es una oda hacia ella, ni mucho menos....ya llego al punto. El tema es que, con el pasar de los años (qué anciana me sentí), nuestros encuentros o salidas han sido cada vez más distantes (inserte pequeño bebé aquí).

Bueno, el punto es que nos vimos ayer. Créanme cuando digo que estaba emocionada por verla, porque realmente lo estaba. La última vez que la había visto había sido hacía un mes...así que realmente la extrañaba. "¿Por qué estoy leyendo toda esta sarta de cosas sin sentido?", se preguntarán algunos...

Porque ayer entendí algo. Entendí algo por primera vez en la vida, creo. Soy de la clase de persona que tiene determinada idea de qué es la amistad y qué puedo esperar de mis amigas (o exigir, muchas veces). Ayer, hubiera esperado que - como no la veía hace un mes - habláramos sin parar, "sin mirar atrás" como solemos decir.

Hubiera deseado que ella también se mostrara más receptiva y no tan..."muerta mode on", si puedo llamarlo de alguna manera. Hubiera deseado que me contara todo con lujo de detalles...y no se mostrara tan distraída, como por ratos la pesqué.

Pero cuando me fui, cuando salí de su casa y empecé a caminar hacia...Plaza Vea (nada místico en ello), entendí que quizá sólo debía aceptar ese encuentro como un buen encuentro. Debía dejar de esperar que fuera como yo quería que fuera y por primera vez en la vida, debo confesarlo, no sentí cólera porque hubiera sido distinto. Entendí que...quizá los años no habían pasado en vano, que ella ha pasado por mucho y quizá a veces tiendo a compararla con su "antiguo yo". Quizá, sólo éramos más chicas, y ahora tengo a una mujer frente a mí, lo cual, por último, es algo bueno (¿verdad?).

Así que...ayer me sentí liberada. Liberada porque por fin, podré no molestarme o sentir que "algo faltó" cuando vaya a verla, y con gran sorpresa, me di cuenta que "it was O.K".